Experimentos para todos

 Hacer Hielo Caliente



1.    Disolver en agua caliente suficiente acetato de sodio.

2.    Ir revolviendo hasta que no se disuelva más acetato. Esto indica que la solución llegó a su punto de saturación.

3.    Retirar del fuego, dejar enfriar unos minutos.

4.    Colocar la solución en un vaso de paredes lisas a enfriar en el congelador durante 20 minutos.

5.    Asegúrate que la sal que no alcanzó a disolverse se quede en el sartén.

6.    Retirar el vaso del congelador y verter con cuidado en algún platito.

7.    Tocar la superficie del liquido con el dedo y…

8.    ¡Hielo instantáneo!



El Globo que no revienta

Ingredientes:

Globos de carnaval
Agua.
Cigarrillos
Fósforos o encendedor.

Experiencia:

Primeramente demostramos al público lo que sucede cuando acercamos un cigarrillo encendido a un globo inflado con aire, se ve como el globo revienta al hacer contacto con el cigarrillo. Ahora, tenemos un globo inflado con agua, mejor si no tiene burbujas de aire,  acercamos el cigarrillo encendido apretándolo contra el globo, en un lugar que no tenga burbujas de aire para que el globo no reviente, y la pregunta es ¿qué debería pasar  con el globo por lo que hemos visto anteriormente? Cualquiera diría que revienta....pero ¡¡ no se revienta!! ¿Por qué no pasa lo que debería pasar?

Explicación:

Pasa que cuando  acercamos el cigarrillo encendido al globo inflado con agua, esta absorbe el calor del cigarrillo sin causar daño al globo. Esto se debe a una propiedad que tienen todos los cuerpos que se llama “capacidad calorífica”, es decir, la capacidad que tienen  los materiales para almacenar el calor, en este caso, el agua tiene una capacidad calorífica mayor que la del globo y que cualquier otro material. Y ¿por qué no le pasa nada al globo?, es porque el calor que absorbe el agua es transmitido en forma de energía que pasa por el globo sin dañarlo.





Cohete impulsado por agua  

Materiales:
  • Una botella de 2 litros de plástico, como las de refrescos.
  • Una bomba de inflar ruedas de bicicletas.
  • Un tapón de corcho horadado.
  • Tres ladrillos.

Procedimiento y explicación:

1.     Llena la botella con agua hasta la mitad. Ponle un tapón de corcho, con un agujero por donde puedas conectar la bomba de bicicleta sin que se salga el agua.
2.     Pon en el suelo la botella boca abajo, con la bomba conectada. Tres ladrillos verticales a su alrededor te servirán para que se mantenga en vertical. Todo esto hazlo en un lugar donde no importa que se vierta el agua del interior de la botella.
3.     Con cuidado de no inclinar el cohete-botella, ve metiendo aire en su interior con la bomba hasta que el tapón de corcho no soporte la presión interior. Entonces saldrá el agua hacia abajo e impulsará al cohete hacia arriba, como hacen los gases de un cohete a reacción, que salen impulsados hacia adelante por el principio de acción y reacción.

¿Cómo funciona?


Los cohetes funcionan gracias al principio de acción y reacción: los gases que salen por los motores empujan al cohete en dirección contraria. Esos gases se producen al mezclar el combustible con oxígeno.







El termómetro
 Materiales 
- Pajita.
- Botella de plástico de las que se utilizan para bebidas con gas.
- Termómetro para medir la temperatura exterior. 
- Colorante alimentario.


Fundamento científico:

En esta experiencia vamos a aprender a fabricar un termómetro muy simple. El termómetro tiene un fundamento muy sencillo. En la botella dejamos una cámara de aire que se dilata al elevar la temperatura, aumentando la presión. Para poder equilibrarse con la presión atmosférica exterior, el líquido sube por la pajita. Cuando se enfría, ocurre lo contrario.

Desarrollo:

- En primer lugar, necesitas atravesar el tapón de la botella con una pajita larga (o varias pajitas unidas), de forma que, al cerrar la botella con el tapón, el extremo de la pajita quede cerca del fondo.
- A continuación, debes rellenar la botella con agua teñida con el colorante alimentario (aproximadamente 1/4 de su capacidad) y simplemente cerrarla apretando el tapón.
- Introduce la botella en agua con hielo y observa cómo, al disminuir la presión en el interior de la botella, comienza a entrar aire a través de la pajita (burbujea) para que se iguale con la presión atmosférica.
-  Deja que entre aire durante un rato y saca la botella del agua dejándola a temperatura ambiente. Observa cómo comienza a subir el líquido coloreado por la pajita. Déjalo hasta que se mantenga estable.
- Para graduar el termómetro, cuando la altura del líquido en la pajita se haya estabilizado, haz una marca con un rotulador. Corresponderá a la temperatura ambiente que marque el termómetro exterior. Con distintas temperaturas ambiente podrás hacer nuevas marcas y graduar el termómetro.
  También puedes introducir la botella, junto con otro termómetro en agua fría. Entonces el nivel del líquido en la pajita descenderá. Esperamos a que se estabilice y hacemos una marca con el rotulador anotando la temperatura que indica el termómetro externo.
- Repetimos la operación con agua templada. Volvemos a hacer una marca y anotamos la temperatura que indica el termómetro externo. Ya tenemos tres temperaturas marcadas. Basta con que hagas marcas a intervalos regulares para terminar de graduarlo.
Este termómetro es muy sensible y basta con que acerques las manos a la botella para que suba el nivel del líquido.